ORIGEN Y LA HISTORIA DEL ROSCÓN DE REYES
Se dice que el Roscón de Reyes tiene el origen en la época del Imperio Romano, y lo consumían los Césares. Era un pastel de la forma redonda y circular que ofrecían al dios Jano, que era el díos de la suerte, para pedir la protección durante todo el año.
El mayor impulsor fue el Rey Luis XV de Francia en la Corte Francesa. Se dice que el cocinero de la corte del Palacio de Versalles, el día de la Epifanía, seis de enero, hizo un Roscón tradicional e introdujo una sorpresa para el rey, obsequiándole con un diamante. Así quedó establecida la sorpresa que aún perdura en el día de hoy.
Luis XV quedó encantado y lo propagó por otras Cortes, y así llegó a España en el siglo XVIII. Desde la nobleza pasó al pueblo llano y se extendió por toda España. Al extenderse por América, donde está más arraigado es Méjico.
Países como Italia tienen la costumbre de introducir una legumbre, que según los pasteleros representa una regeneración, el resurgir de la vida, el brote germinal, en definitiva, el Año Nuevo.
En España al ser el postre del día de Reyes, la tradición dice que la persona que en su trozo tiene la suerte de encontrar la sorpresa, será la que tendrá la suerte durante todo el Año Nuevo, concesión que le hacen los Reyes Magos.